«Me sentí violada»: hablemos de las familiares de los presos políticos 🎯

Martes 10 de diciembre de 2024

[Relleno]

🚂 Llevaba hierro y quedó en amasijo de ídem

Que alguien le dijo que un militar lo vio: que parece que Carlos Eduardo está «bien». En una enfermería y con vías en las venas, pero «bien». La verdad se le pierde en el camino a Isabel Ramírez, la mamá que el fin de semana se enteró de que su hijo —el preso postelectoral Carlos Valecillo— intentó quitarse la vida en la cárcel de Tocorón. Pide que le dejen verlo con sus propios ojos, pero sobre todo que lo suelten porque asegura que es inocente, que no es un «terrorista».  Isabel protestó ayer junto con otras mujeres frente a la sede del Ministerio Público en Parque Carabobo (Caracas). Pero hay que oír a los papás también: «Se están muriendo de hambre» dentro de las cárceles, gritó un hombre por su hijo Emer Sirit (25), otro preso político en Tocorón.

Algunas de las manifestantes frente a la fiscalía ocultaron sus rostros con pañoletas. Denunciaron que en uno de los campos de concentración de presos políticos (Yare), un funcionario identificado como Ángel Castro las amenazó e intimidó por aparecer en videos de vigilias y protestas. Además, los tratos cada vez son más vejatorios en la requisa durante las visitas a los reclusos. «(Una funcionaria) me pidió que con mis manos me abriera la vagina, agarró su celular y alumbró en mis partes íntimas. Después, me pidió que pujara como si fuese a parir (...). Fue horrible, me sentí violada sin penetración», relató una mujer en Parque Carabobo. Sin comentarios.

Los derechos humanos te deben sonar muy abstractos en este momento, pero desde la lejana Ginebra, el alto comisionado de DDHH de la ONU (Volker Türk) reveló que su oficina reanudó «parcialmente» sus actividades en Caracas y que pronto esperan volver a «visitar» prisiones. El régimen expulsó a los miembros de la oficina en febrero. El propio António Guterres, secretario general de la ONU, recordó ayer a Venezuela —a través de una portavoz— que debe respetar el «principio de inviolabilidad de las sedes diplomáticas», a propósito de los seis colaboradores de MCM asediados en una quinta de Caracas. Vente Venezuela dice que ya se están quedando sin alimentos, además de que les cortaron la luz y el agua desde hace más de dos semanas.

Benito Chirinos es la excepción de la regla: lo detuvieron el sábado y lo liberaron el domingo. Es director de la alcaldía de Cabimas (Zulia), bajo control opositor. Pero sigue presa su esposa, Arelis Ojeda, que también es funcionaria municipal.

Quedó vuelto ñoña un tren, afortunadamente no de pasajeros, sino el que transporta el hierro en la empresa básica guayanesa Ferrominera. Es el sexto accidente desde 2018; los obreros lo achacan a la ausencia de mantenimiento. En menos de dos semanas, barcos provenientes de Venezuela con cargas de cocaína han sido interceptados por España (#29Nov) y Puerto Rico (ayer). En el régimen se ocupan de condecorar a los nuevos sancionados por EEUU y cerrar una nueva emisora en Coro. 

Tenemos que seguir echándole pichón y en San Cristóbal, al menor por un día, armaron el parrandón: así recibieron al equipo Deportivo Táchira tras coronarse monarca de nuestra nación; en esas tierras el fútbol es una religión. Otro en modo celebración es Jefferson Savarino, el chamo del club Botafogo servidor: primero de la Copa Libertadores campeón, ahora ayudó a ganar el Brasileirão, en el país vecino el título superior 💃🏽. 

[Masa]

Manjares ilegales 🍽️

Para satisfacer el apetito de China, Venezuela exporta la Holothuria mexicana, una especie de pepino de mar que entre más feo, más sabroso. Este espécimen recicla nutrientes, airea el sedimento, controla la acidez del agua y asimila la biodiversidad. En un país normal, antes de explotar a lo loco, se determina el número de ejemplares, cuántos se pueden extraer sin poner en riesgo la sostenibilidad del medio ambiente y del negocio (spoiler: no hay tantos en nuestras costas). Sin embargo, según la nueva investigación de Armando.info, más puede la avaricia chavista y también la gula extranjera: 

🥒 La pesca del pepino de mar está prohibida en Venezuela desde 1997. Las autoridades en ese momento argumentaban que era necesario hacer estudios para demostrar la factibilidad de llevar a cabo la labor con características de sostenibilidad y respeto por el medioambiente. Al gobierno actual esto le sabe a casabe, porque así como el oro, el coltán y la chatarra, este animalito marino se convirtió en un bien exportable (ilegal). Uno bastante lucrativo, ya que en 2017, el precio del kilo era de entre ocho y 80 dólares en mercedes internacionales, si el pepino de mar estaba fresco. Ya procesado valía entre 300 y 1.000 dólares. 

🥒 Venezuela intentó reproducir los pepinos de mar en granjas acuáticas. Dos empresas obtuvieron los permisos de extracción, pero ninguna logró su propósito. Una de ellas, Inversiones Island Fisher C.A., estuvo en manos de Brahim Yamal El Maaz Bahssas hasta 2019 —año en que cerró—, cuñado de Tareck El Aissami. En teoría, la empresa capturó y luego secó 55 mil ejemplares (840 kilos), pero no hay registro aduanero de la exportación. Cuando el expresidente de Pdvsa cayó en desgracia, la prensa oficialista publicó en agosto denuncias sobre una presunta estafa cometida por Maaz en el sector minero que supuestamente le costó al país 3,2 millones de dólares.

🥒 La segunda es la Fundación de Especies Marinas (Fundemar), un ente privado creado en noviembre de 2020. El intento de reproducción solo consiguió tener larvas, pero ningún ejemplar pasó de juvenil a adulto en los experimentos. De todos modos, la empresa contrata pescadores para la extracción del pepino de mar. Las manos no le llegan a los bolsillos, eso sí: ofrece un dólar por cada ejemplar capturado. Tampoco da equipos de buceo, por lo que los pescadores pasan horas en altamar, todos los días de la semana, con lo que tienen a la mano (bien pueden ser mangueras, compresores de gasolina o absolutamente nada), poniendo en riesgo su salud.

[Concha]

Policía de monos 🐵

¡Mono de Caricuao, sal con las manos en alto! No queremos hacerte daño. Repito: sal con las manos en alto. Sabemos que estás asustado, pero no eres un prisionero aquí. Los niños están esperando para volver a casa, salir al recreo en calma y llegar al preescolar por la puerta principal sin necesidad de que los corretees. Vamos a resolver esto juntos. No estamos aquí para pelear. Los padres y representantes dicen que eres agresivo, que atacas al personal de la escuela, que no dejas que nadie se acerque. Ya eres tendencia en Venezuela. ¿Qué más quieres? Sal con las manos en alto.

Tras la pista del Irving Hall: el lugar en el que una niña llamada Teresa Carreño debutó en la Nueva York de 1862 🎹

Arepita