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domingo 15 de mayo de 2022

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[Fruta]

Otra forma de contar país

Hace un mes cumplimos un año desde que empezamos esta suerte de suplemento cultural y de fin de semana. Desde nuestra primera edición hemos cambiado mucho, y hoy reflexionamos con colegas sobre el porvernir | Pásate por nuestro histórico reciente

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La periodista Hilda Lugo llegó a El Nacional en 1996 y ahí lleva más de 20 años. Fue pasante, redactora, coordinadora, jefa de sección y ahora es jefa de Información. ¿Su especialización? Una en la que empezó sin querer: periodismo cultural. De adolescente, leía el periódico y ya cuestionaba el nombre de algunas secciones: “¿Por qué se llamará ‘Farándula’ y no de otra forma?. A lo mejor no era chisme, pero a mí me remitía a chisme. En el Cuerpo C, el de Cultura, estaban los intelectuales, el cine de autor, la música académica. Pero en Farándula, las últimas páginas del Cuerpo B, de Deportes, entraba el Miss Venezuela, las telenovelas y sus protagonistas, la radio, el cine comercial. En ese momento me decía: ¿Acaso esto no es lo mismo?”.Esos muros se irán derribando años después, pero por décadas la cobertura periodística estuvo dividida de esa forma. Ella quería cubrir Deportes, pero había vacante era en Farándula y así inició. “Mi jefa, Érika Tucker, que venía de hacer un programa llamado A Toque en Venezolana de Televisión, tenía una visión muy amplia de qué era el periodismo cultural y cómo abordarlo”, recuerda. “Ella me dijo que siempre en ese actor, esa actriz, ese músico, esa Miss, siempre hay una historia más allá del personaje que tienes al frente, siempre hay una historia que contar. No te quedes con lo elemental, no te quedes con lo primero que intentan venderte. Vas a ser mejor periodista en la manera en cómo intentes hacer las cosas diferentes, no como lo hace todo el mundo”. Esa fue la impronta: “A través del periodismo cultural puedes contar la historia de un país”. ¿Qué y cómo se cubre el periodismo cultural en pleno 2022? Buena pregunta, múltiples respuestas. Empecemos con su presencia en el ecosistema de medios. Las secciones de Cultura nunca fueron una prioridad y siguen sin serlo, aunque hacemos mención a las páginas de El Nacional y El Universal, otrora referencia. “Si bien se mantienen las secciones en los principales medios, es verdad que la diáspora afectó y ya no son tan numerosas como antes. Eso inevitablemente se siente en la cobertura, donde hay hechos que se dejan de cubrir, a pesar del esfuerzo de los periodistas que se mantienen”, explica Humberto Sánchez Amaya, que escribe, sobre todo, de música y cine, pero no es excluyente (y si te van las entrevistas, también tiene un podcast). No solo la diáspora, sino la crisis de modelos de negocios en el mundo. Y súmale al caso venezolano la censura, que bajó la santamaría de cientos de periódicos y cerró radios. Y la televisión venezolana es casi un mero recuerdo. “Los nuevos medios digitales todavía tienen una cobertura casi inexistente de la fuente. Salvo excepciones, su foco principal está en las notícias de política, economía y sociedad”, agrega Sánchez Amaya.Y así como la crisis del país afectó a los medios, afectó lo que cubren: “Me temo que las infraestructuras culturales en Venezuela han sufrido una embestida que ha acabado por desmontar las principales y más importantes instituciones. Pasamos de informar lo que podía ocurrir en ellas a describir cómo han desaparecido o cómo se han deteriorado”, señala Karina Sainz Borgo. 

Manual de Carreñoversión: periodismo cultural

 Manuel Antonio Carreño influyó casi un siglo en América Latina con su Manual de urbanidad y buenas maneras (1853), que indicaba cómo comportarse en sociedad. ¿Bailar, comer, aplaudir, cortejar? Todo estaba allí. Ahora forma parte de la cultura pop como una forma de dar recomendaciones. Incluso Netflix lanzó el suyo. Quisimos armar uno preguntándole a periodistas qué recomendarían si tuvieran que hacer un manual de buenas prácticas. Vayamos:  Hilda Lugo: “Leer mucho. Ver todo tipo de espectáculos, desde lo que te gusta, hasta lo que menos te gusta. Ir al teatro, ir al cine, ver televisión, escuchar radio, etc. Leer, ver, escuchar [todo]. Siempre confirmar y contrastar. No importa llegar de segundo, importa echar el cuento bien. Y…  puedes tener tus gustos, porque te corre sangre por las venas, pero antes que fan, eres periodista. Es una línea muy delgada. Mientras estás trabajando, no eres fan. Hay una distancia que tienes que respetar”.  Humberto Sánchez Amaya: "Ir más allá de gustos personales. Aunque parece obvio, recordar que el mundo no empezó cuando nacimos, sino que hubo mucho antes. Solo así podremos tener una visión más amplia del presente. El pasado como extensión de lo que somos. Entonces, adentrarse en lo realizado, pero también en sus contextos, enriquece cualquier dinámica en la labor".  Jorge Carrión: “No creo que me interesara hacer algo así. Creo en la poética personal de cada periodista o crítico”.  ✨PLUS: Te dejamos estas recomendaciones para manejarse en medio de la metamorfosis del periodismo cultural, que recogió la Fundación Gabo, como parte de un taller que dictó Carrión en 2020.  Karina Sainz Borgo: "Curiosidad. Una persona sin curiosidad es un mal periodista, alguien incapaz de descubrir los entresijos de cualquier episodio de la vida".

Avancemos con el abordaje de la fuente. El periodista Jaime Bello-León, cuya tesis de grado fue justamente sobre el periodismo cultural venezolano, considera que hay algunas deudas: “Aún se le sigue considerando elitesco, lo cual es un error inmenso, y, por tanto, se sigue subestimando sus posibilidades y alcance. El reto principal sigue siendo el sesgo, el desconocimiento y el miedo a la fuente. Nos parece muy importante (y lo es) una hazaña deportiva, pero ignoramos al creador cultural. Seguimos pensando en términos anacrónicos el hecho cultural, su importancia y su influencia”. Agrega: “Me parece que el ejercicio del periodismo cultural exige especialización y la asistencia del conocedor, del especialista y del crítico. No debe quedarse en la promoción de eventos, sino que debe dar razón de su realización y del valor de ésta (...) Creo que el periodismo cultural es medular. Si lo dejamos de lado, si lo consideramos menor, accesorio, digno de no ser titular sino cuando hay escándalo, es que no estamos valorando a nuestra cultura ni a nosotros mismos de manera adecuada”. También hay temas que se quedan por fuera. La joven periodista Carolyn Manrique considera que la definición de Cultura debe ampliarse. “Lo que es nuevo, muy de jóvenes, no suele ser tan aceptado. Los medios también le dan más importancia a ciertos temas que a otros. Por ejemplo, apuestan demasiado por reseñas de cine. Siento que simplemente desecharon el teatro y las artes visuales”. Sánchez Amaya apunta en este apartado un producto cultural: los videojuegos. “Creo que han sido subestimados durante años, se consideran una expresión menor. Si bien es un tema controvertido asumirlos como artes, creo que es una discusión que se pueda dar debido a los aspectos que surgen alrededor”. El periodismo cultural en Venezuela tampoco está exento de los retos globales. El consumo cultural cambia y se transforma con la tecnología. Las bibliotecas de streaming no dejan de crecer y que un contenido sea el más visto no quiere decir que sea el mejor. Para Bello-León, en esta tarea la figura del editor es clave y Sánchez Amaya pone el acento en esos otros contenidos que el algoritmo no posiciona: “Entra la labor del investigador, de ese curioso que indaga entre lo que no es obvio para presentar lo que todavía no tiene el foco encima, para interactuar, dialogar y potenciar”. Entra en el juego también lo que se hace viral y qué hace el periodismo con eso. “Hay algunas cosas virales que pueden convertirse en hechos noticiosos importantes. Todo viene dado en función de cómo el periodista trabaje esa viralidad y quiera hacer de esa información, una más relevante, con contexto, perspectiva. Tienes la posibilidad de presentar algo distinto, de darle otra lectura al ruido que pueden ocasionar las redes sociales. Ellas a veces pueden ser una guía, pero no marcan tu trabajo”, dice Lugo. ¿Cómo enfrentar esos desafíos? De muchas formas, dependiendo de dónde estés parado. Bello-León nos deja una pista: “El periodismo tendrá sentido si logra trascender y aportar”.

[Caña clara]

“El gran desafío es leer el presente”

Jorge Carrión es defensor de los OCVI: Objetos Culturales Vagamente Identificados, que son aquellos productos culturales que trascienden lo tradicional y la academia

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*tos* y el periodismo *tos*— no se ha ocupado tanto de ellos. Un texto complementario: sus ideas para renovar el periodismo cultural 

Cuando al ensayista y escritor Jorge Carrión (Tarragona, España, 1976) se le pregunta sobre el concepto de “Cultura” y lo que podría entrar en una sección con ese título, señala que no le corresponde hacer esa definición. Pero, como crítico cultural, sí apunta lo que cubre: lenguajes artísticos contemporáneos como cómics, arte, series, cine, danza, música, performance, podcast, videojuegos y pare de contar. Es autor de siete libros de ficción, seis ensayos, entre los que destacan Teleshakespeare, Librerías, y, el más reciente, Lo viral. Su podcast Solaris ya terminó, pero prepara un nuevo proyecto de ensayos sonoros. —¿Cuáles áreas consideras que han sido inexploradas por el periodismo cultural?—En la actualidad creo que las artes y narrativas clásicas, como la literatura o el cine, están sobrerrepresentadas en los medios convencionales, mientras que todas aquellas que han surgido en formato digital, como las de las redes sociales, el podcast o las narrativas virtuales o interactivas están infrarrepresentadas. Supongo que se trataría de encontrar un equilibrio. Y de representar con justificación los gustos y los consumos del mundo, y no sólo de lo que nos gusta a los profesionales del periodismo cultural. —Ahorita hay contenidos en distintos formatos y para todo tipo. Libros, películas, videojuegos, podcast, streaming, música, etc. Y así como hay ese tipo de ofertas, también hay múltiples opiniones en esos mismos formatos. ¿Qué papel cumple entonces el periodismo cultural?—Supongo que por un lado es prescriptor, es decir, orienta, selecciona, entre esa oferta brutal de objetos culturales, y señala aquello que es quizá más interesante o pertinente o relevante. Y, por el otro, es crítico, es decir, quien pone en crisis el panorama, y entre los diversos proyectos ve líneas, puntos en común, desacuerdos, posibles constelaciones, tendencias.—Las bibliotecas de las grandes plataformas de streaming no dejan de crecer. No es humanamente posible revisarlo todo. No siempre lo más visto es lo mejor. ¿Cómo resaltar algo en medio de tanta oferta? ¿Cómo hacer crítica en este contexto?—Es un problema, ciertamente, pensar que un individuo puede ser capaz de leer el conjunto. Tal vez se trate, incluso, de una ficción moderna que ha dejado de tener sentido en el siglo XXI. Pero finalmente nuestra escala es humana, de modo que seguimos confiando en lo que otro humano pueda decirnos sobre la literatura o el arte. La opción algorítmica, en alianza con la inteligencia colectiva, no obstante, existe y no [deja] de ganar terreno: Goodreads o TripAdvisor son más influyentes que los críticos literarios o gastronómicos.—¿Consideras que la conectividad y el internet han banalizado la crítica cultural?—No. Tampoco lo hicieron la televisión, la radio o la prensa periódica. Los medios condicionan los discursos, claro, pero no para mal, aunque así lo perciban sus contemporáneos más apocalípticos.—¿La viralidad juega en contra del periodismo cultural o la beneficia?—Ni una cosa ni la otra. O depende de cada situación. Lo viral es inseparable de la cultura del siglo XXI, para bien y para mal.—Dictaste un taller de periodismo cultural con la Fundación Gabo en Buenos Aires recientemente. ¿Qué carencias y retos ves actualmente en el periodismo cultural?—El gran desafío es leer el presente. Y eso ya no se puede hacer solamente con las herramientas que los periodistas en activo aprendieron en las facultades de periodismo. Hay que actualizarse. Y no es fácil, porque también deben hacerlo nuestro cerebro, nuestra mirada, nuestra sensibilidad.

[Melao]

El periodista Luis Carlos Díaz desde 2018, o quizás antes, tiene clara una cosa: lo pop puede dictar cátedra.  Comenzó con conversatorios y ya va por un podcast semanal. 

El equipo de Guarapita ya tiene un año al frente de esta taguarita cultural con todo lo que eso conlleva. Pero por ser creadores de contenido no quiere decir que dejemos de ser fans. Más bien, todo lo contrario. Te dejamos una selección brevísima de trabajos que nos inspiran a decir “mira, yo quiero hacer algo así”. Crysly: “Esta entrevista es de Isaac González, de El Nacional. Es a propósito de un reconocimiento que recibió el podcast de Erika de La Vega, que ahorita es uno de los más famosos del mundo. Sí, la entrevista habla del éxito, pero también de las cosas que no se ven a simple vista, la depresión, por ejemplo. Me impactó mucho en su momento y creo que es una de las mejores entrevistas que he leído”. Alexis: “Tuve la fortuna de tener como maestros a una de las mejores generaciones del periodismo cultural venezolano, la que se juntó en El Nacional (impreso) entre 1996-2006: plumas como Hilda Lugo Conde, Erika Tucker, Héctor Bujanda o Rafael Osio Cabrices. Lamentablemente, con la expropiación de la sede, muchos de esos textos se han perdido o no están disponibles al público, pero me gustaría recuperarlos poco a poco y, ¿quién sabe?, reunirlos en un libro o una web. Aquí hay un ejemplo (una entrevista a Trino Mora de 2000), y en este PDF de Banesco hay otros textos de esos años”. Valentina: “Esta entrevista de VICE que le hicieron al promotor musical Julio Correal. Me encanta la combinación entre el testimonio y las animaciones, el humor y que no le pusieron filtros al pana a la hora de echar su cuento. Además, las historias sobre el making of de los conciertos me encantan. Siento que a veces no se le pone la suficiente atención a la paridera que implica traer un artista internacional”. Leoner: “Comida, calle y comedia. Básicamente José Rafael Guzmán sale a caminar por las calles populares de los países de la región y, mientras echa vaina, se va encontrando con sus culturas. Desde los chochos (comida ecuatoriana, malpensado) que venden en Quito, hasta el mercado de brujería en Sonora (México) donde se puede regatear una tirada de cartas. El tipo muestra mucho de ese mundillo que todos los países tienen, pero casi no conocemos”. Verónica: “Este reportaje de Reuters es mi favorito (link en inglés). Combinan periodismo de datos con periodismo cultural, enfocado en fandom (en este caso, ARMY, las fans de BTS). Le dio foco a la seriedad que hay detrás de las fans de un grupo en el contexto de un evento social nacional. Plus: visualmente es genial para explorar el contenido”.Daniela: “Tokyo Idols (link en inglés) es mi documental favorito de la vida. Kyoko Miyake hace un trabajo brutal presentando el submundo alrededor de los grupos idol de Japón y la cultura otaku de la mano de quienes participan en ella, sin dejar de lado el análisis sociológico por parte de expertos. Incluso si no sabes nada sobre las idols japonesas, este es uno de esos reportajes que te atrapa y luego te deja pegado en Wikipedia con ganas de saber más”.

[Lo recién embotellado]

Siempre te dejamos los eventos próximos, pero esta vez nos toca a nosotros. Después de varios Twitter Space, te invitamos a nuestra primera conversa presencial para soplar la primera velita de esta taguara 🎂

🍹 Un sábado relajado y además saldrás resuelto del alma. El próximo 21 de mayo nos vemos a las 4:00 pm para festejar nuestro primer aniversario guarapitesco con un evento pre-sen-cial. Sí, porque tenemos ganas de volver a vernos. La cita es en la librería Alejandría del Centro Comercial Paseo Las Mercedes (Caracas) para hablar de periodismo cultural, en un sentido amplio. Nos acompañarán miradas desde varias generaciones: desde el pavo Aquilino José Mata y Simón Villamizar hasta las chamas Carolyn Manrique y Catherine Medina Marys. Y bueno, como si fuera poco, tendremos a Ricardo del Búfalo, que no precisamente desafina, para hacernos reír, cantar y reflexionar con los temas de su nuevo álbum Venecadencia. Por supuesto, habrá unos traguitos artesanales y buena vibra. ¡Te esperamos!🥑 Retrofuturismopsicotropical: si tienes fobia a las palabras largas, lee cada una por separado y más o menos ya tendrás una idea de por donde viene el primer disco de estudio de Motherflowers, la propuesta de Puerto La Cruz integrada por Irepelusa, Frank Lucas y Veztalone. La duración estimada de vuelo es de una hora y están volando a una altura de 17 canciones, incluyendo featurings con Willie DeVille, Anakena, Mangus, Apache y pare de cantar. Para junio podrían estar de gira por la capital y esperemos que por otras ciudades, pendientes en su Instagram. 💑 Antes muertos que separados. Hace 425 años se publicó el guión de Romeo y Julieta y de esta infatuación a primera vista, fugaz y frustrada jamás nos cansamos, porque siempre hay nuevas maneras de contarla. Con la protagonización de Aimeth Landaeta y Theylor Plaza, los amantes de Verona marcan el regreso de la Experiencia Shakespeare a los espacios de la Asociación Cultural Humboldt (Caracas). Todo a beneficio de la Organización Nacional de Trasplante de Venezuela. Revisa las cuatro funciones de mayo aquí.🦎 Gecko es una forma de llamar a nuestro popular tuqueque o limpiacasas. Ese chasquido también identifica a un movimiento de panas que está tratando de recuperar la narrativa cinematográfica —a punta de tecnología bajo costo y creatividad— en Valencia. Hace unas semanas hicieron su primer festival (Geckocortos) en la ciudad de las naranjas y en su canal de YouTube puedes ver tres de los videos, entre ellos Se repite, la historia de un trabajador de delivery que hace su entrega más acontecida. Más de esta iniciativa de recuperación cultural carabobeña en este reportaje

Considero al periodismo como un género literarioal mismo nivel que la novela, la poesía, el cuento y el teatro.Y es importante porque es un género literariocon los pies puestos sobre la tierra.La literatura permite evadirse,pero con la formación periodísticaun cable lo retiene a uno en el sueloGabriel García Márquez,escritor y periodista colombiano 

Guarapita, un destilado deArepita