Sábado 26 de enero de 2019

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[Relleno]

Yo no estoy llorando, tú estás llorando. El periodista y escritor Martín Caparrós estuvo en Caracas y ofrece

esta crónica breve, poética y dolorosa de nuestra capital

Entre las cosas que no sabrás, cortesía de la censura y el bloqueo, está la cifra de muertos en las protestas de estos últimos cuatro días —que parecen tres años, dígalo—. 29 venezolanos han muerto ejerciendo su derecho a protestar, según el Observatorio de Conflictividad Social.

España, en un giro inesperado de la trama, acaba de dar un plazo a Maduro: si en 8 días no se anuncia una fecha para elecciones·"libres", reconocerán a Juan Guaidó como presidente encargado. "Queremos democracia y elecciones libres en Venezuela. No queremos poner y quitar gobiernos", dijo Pedro Sánchez, presidente del gobierno español. Rápidamente, su par de Francia, Emmanuel Macron, lo secundó en 👉 este tuit. 

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó anoche medidas cautelares de protección a favor de Guaidó y sus familiares 🤟. Ajá, los usurpadores no las van a ejecutar ¿o si?, pero les quedará anotado en el libro gordo, y no precisamente de Pepete, sino de las violaciones de derechos humanos que han comedito en estos duros años.

“No, papi, tiene que venir el titular de la cuenta, si no no te puedo ayudar”. Más o menos algo así le dijo el Banco de Inglaterra a Maduro cuando le rechazaron un retiro de oro valorado en $ 1.200 millones, por no reconocerlo como Presidente.

Hoy hay asambleas populares a las 10 de la mañana en plazas y espacios públicos. Mañana domingo, panfletazo para llevar la Ley de Amnistia a cuarteles y comandancias. Aquí tienes la ley en PDF para que la descargues, imprimas, compartas o memorices.

Como las cosas están pasando a la velocidad de la luz, ayer Guaidó y Nicolás convocaron a ruedas de prensa simultáneas. Nicolás se encadenó y habló de Carmona. Guaidó atendió a los periodistas en la calle hablando de los planes para los próximos días. ¡Menudo contraste!

La ruta sigue siendo, como un mantra: 1) cese de la usurpación madurista; 2) gobierno de transición; 3) elecciones libres. Pero... ¿qué necesitamos para que eso pase? Eugenio Martínez tiene la respuesta. La tarea no será fácil y nombrar un CNE nuevo es como esa relación con tu ex tóxico: complicado. Jose Ignacio Hernández explica todo el quilombo jurídico de la transición.

Ya pasados unos días, comienzan a revelarse algunos datos de cómo se gestó el plan Guaidó. A mediados de diciembre fue a Colombia, donde tuvo algunas reuniones, luego viajó a México y a Washington DC a lo mismo, según una exclusiva de AP.

Nicolás, queriendo siempre figurar, dijo que también quería reunirse con él: “Si tengo que ir a encontrarme con éste muchacho de gorra y capucha (Guaidó) en el Pico Humboldt, a las 3:00 de la mañana, lo voy hacer. Si quiere que vaya desnudo, voy desnudo“. Bueno, nadie quería esa imagen en su cabeza. Tranqui, gordis, orange is the new naked.

En el mismo tono de reuniones, Jorge Rodríguez intenta desmentir a Guaidó, diciendo que sí se reunió con Bernal y Diosdado. Y la “prueba” de nuestro villano favorito es una foto de alguien con un suéter y una capucha. Obvio, la gente rompió el internet con el #GuaidóChallenge. Varios comentaron que esta es una señal de cómo los ciudadanos le pierden el miedo a la dictadura.

Mike Pompeo designó a Elliott Abrams enviado de EE UU para “restaurar la democracia en Venezuela”. ¿Quién es el señor? Un conocido y controvertido personaje que trabajó en la administración de Reagan y Bush hijo y, por lo visto, muy temido en Cuba. Según Reuters, “contratistas militares rusos” están en Venezuela para proteger a Maduro. Hay gente delirando con estos déjà vu de la Guerra Fría, pero mantengamos el foco en lo importante. 

La pregunta del millón: ¿Y tú qué crees que pase?

Pareciera que Maduro se va a aferrar al salvavidas de diálogo que Uruguay y México le están lanzando, mientras usa los juegos mentales de Jorge Rodríguez para despistar y desesperanzar a los demócratas.

Lo de Guaidó en Chacao, ayer, parece demostrar que no hay acuerdo (o fuerza) dentro del gobierno de facto para apresarlo. Eso facilitará nuevas manifestaciones en favor del gobierno interino en los próximos días.

El problema que tiene Maduro, y que no tenía en crisis anteriores (aparte del sobrepeso obsceno), es que, aunque logre apaciguar a la fuerza las manifestaciones, el cerco diplomático va a seguir intacto… o quizás hasta empeore. Así va la cuenta de pronunciamientos de los países. Por eso inventarse un diálogo es de las pocas opciones que le quedan.

Guaidó, por su parte, ya habla de ejecutar planes durante el gobierno de transición, que duraría entre 6 y 9 meses. Por ejemplo, la llegada de ayuda humanitaria y la orden a funcionarios consulares venezolanos de que se queden en Estados Unidos. Claro, no es que los alimentos y las medicinas van a llegar relajados a Maiquetía... habrá que encontrar una manera de hacer que pasen. Mientras tanto, suena desde este momento en tu cabeza esta canción: “¿y los militares pa cuando?”.

Tratando de entender quién tiene la cochina del dominó,

SoyArepita